Tipos de Montacargas
Los montacargas son máquinas muy versátiles que se pueden encontrar en casi cualquier almacén y planta de producción. Son vehículos para manipulación de materiales muy comunes, y actualmente existen una gran variedad de ellos para la carga y descarga, el apilamiento, el transporte de corta distancia y las operaciones de manipulación de objetos pesados y demás materiales. Aunque la mayoría de las veces no se le da relevancia suficiente a este tipo de máquinas, los montacargas marcan una gran diferencia dentro del mundo de la logística mundial.
A pesar de contar generalmente con funciones muy sencillas son un elemento básico no solo en la industria de la logística, sino en cualquier industria que necesite un equipo de manejo de materiales confiable como son estaciones, puertos, aeropuertos, fábricas, centros de distribución y otros sectores de la economía.
Los montacargas son máquinas hechas para mover pesos de un punto a otro horizontal y verticalmente acelerando significativamente los tiempos de trabajo y reduciendo costos operativos. Su uso debe limitarse a operadores que se encuentren debidamente capacitados y calificados con conocimientos técnicos y normas de seguridad para agilizar y no entorpecer las labores diarias de las empresas y no poner en riesgo al equipo, su entorno, otros compañeros y a sí mismo.
El montacargas (generalmente) utiliza dos barras metálicas paralelas planas en su parte frontal que se introducen en la tarima o pallet (que se encuentra debajo de la carga), llamadas horquillas, montadas sobre un soporte (carro portahorquillas) que se desliza verticalmente por un mástil con lo que se consigue el movimiento de elevación y descenso de la carga. La separación entre horquillas es variable para adaptarse a distintas medidas de tarimas o cargas. Es muy común que estos equipos cuenten con un aditamento llamado “Desplazador Lateral” que permite realizar un pequeño movimiento lateral de las horquillas para poder tomar la carga aún si el equipo no está en la mejor posición.

Los principales beneficios que conlleva el uso de montacargas son los siguientes:
• Facilidad en la manipulación de cargas pesadas.
• Mayor aprovechamiento del espacio.
• Mayor velocidad en la carga y descarga de materiales.
• Mejores condiciones de seguridad y salud de los trabajadores que realizan el movimiento de los materiales.
• Acelera la cadena de suministro y producción.
• Disminuyen los costos operativos relativos al movimiento de materiales.

Los montacargas, a diferencia de la mayoría de la maquinaria, operan en muy diversas condiciones de trabajo. Algunos pueden trabajar en el interior de bodegas con muy poca ventilación, mientras que ciertos modelos pueden operar en el exterior sobre suelos de terracería en mal estado. Algunos más son capaces de maniobrar en pasillos muy angostos, elevando cargas por encima de los 12 metros. También existen equipos diseñados para cargar grandes volúmenes de más de 30 toneladas. Hay una gran diversidad de montacargas que logran cubrir las diferentes necesidades de cada industria, lo que hace que muchos de estos equipos estén altamente especializados para las labores para las que fueron diseñados.
Para lograr realizar todas las operaciones anteriores entre otras más existen muchos tipos de montacargas. Algunos de ellos son los siguientes:

• Contrabalanceados: Este es el tipo más tradicional de montacargas, como su nombre lo indica utiliza un contrapeso del extremo contrario de las horquillas que lo estabiliza y le permite levantar la carga.
• Con estabilizadores:
Utilizan unas barras con llantas que estabilizan la carga y evitan que el equipo se vaya hacia el frente cuando estén levantando la carga.

• Neumáticas: Las llantas neumáticas están infladas con aire y son utilizadas casi exclusivamente para exteriores, suelen utilizarse en los equipos con capacidad de cargar grandes pesos.
• Cushion (o Sólidas): Los montacargas que cuentan con este tipo de llantas se deben utilizar exclusivamente para interiores con pisos epóxicos o pulidos ya que si se usan en pisos rugosos, su tiempo de vida disminuirá dramáticamente. Como su nombre lo indica son completamente sólidas y generalmente son completamente lisas, aunque también existen con dibujo que les permite trabajar en superficies un poco imperfectas. Los montacargas que utilizan este tipo de llantas generalmente son un poco más compactos y pueden trabajar en pasillos un poco más angostos que los rudomáticos o neumáticos.
• Rudomáticas (o Semisólidas): Son llantas muy similares a las neumáticas, pero están rellenas con hule para evitar ponchaduras. Los montacargas que utilizan estas llantas pueden trabajar en interior o exterior.
• No manchantes: Este tipo de llantas puede ser cualquiera de las anteriores, pero está fabricada con un tipo de hule sin carbón que no deja marcas en el piso y son muy solicitadas por industrias que son muy exigentes con la limpieza. Una desventaja es que su precio es superior a las llantas normales.

• Simplex: Los montacargas que utilizan un mástil simplex solo cuentan con una sola sección de mástil. Por lo que la altura esta topada a esa única sección. No son muy comunes porque limita mucho la altura.
• Dúplex: El mástil dúplex cuenta con dos secciones que se deslizan una sobre la otra de manera telescópica para alcanzar una mayor altura. Son comunes en montacargas de alta capacidad.
• Triplex: Actualmente son los más comunes, de manera similar al dúplex, pero con tres secciones que se deslizan una sobre otra de manera telescópica alcanzando una mayor altura máxima manteniendo una baja altura contraída, lo que le permite entrar en espacios reducidos como un contenedor o una caja seca.
• Cuádruplex: Funcionan igual que el dúplex o el triplex pero con 4 secciones. Lo que le permite alcanzar una altura máxima mayor y una altura contraída mínima.
